*La COMAPA Altamira, mediante un programa intensivo, ya arregló 16 hundimientos en diferentes sectores del municipio

Gracias al apoyo del alcalde Dr. Armando Martínez Manríquez y a las gestiones realizadas ante el gobernador del Estado, Dr. Américo Villarreal Anaya, la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Altamira procederá a la reparación de socavones ubicados en diferentes sectores del municipio, para lo cual se aplicará una inversión aproximada de 30 millones de pesos.

A través de un programa intensivo, el organismo operador del agua ya arregló 16 hundimientos de los 77 socavones detectados en Altamira.

El gerente general de la COMAPA Altamira, Dr. Gabriel Arcos Espinosa, explicó que con el apoyo del Gobierno del Estado se estarán reparando y reponiendo líneas de drenaje y colectores, con la respectiva restauración del pavimento y de las áreas afectadas.

Las obras se realizarán en el Bulevar de los Ríos del Fraccionamiento FIMEX, con 800 metros lineales; en la calle Golfo Pérsico de la colonia Nuevo Lomas del Real, con 490 metros lineales; en la calle Abeto de la colonia Monte de los Olivos, con 210 metros lineales; y en la calle Miguel Alemán de la colonia Adolfo López Mateos, con 800 metros lineales.

Asimismo, se trabajará en el camino antiguo a Medrano de la colonia Martín A. Martínez, con 90 metros lineales, así como en las avenidas Monterrey y Cuauhtémoc, en Villa Cuauhtémoc, con 2 mil 100 metros lineales, en la zona rural del municipio, beneficiando con estas acciones a miles de altamirenses.

Recordó que en la zona sur de Tamaulipas se concentra el mayor número de socavones de toda la entidad, al registrar el municipio de Tampico el 40 por ciento, Ciudad Madero el 28 por ciento, Altamira el 23 por ciento, y el 9 por ciento restante los municipios de Nuevo Laredo, Reynosa, Matamoros y Victoria.

“La idea es atender todos los socavones detectados en la Zona Centro, sector Centro-Norte, área DUPORT, Zona Sur y zona ejidal. Estos hundimientos se deben a diferentes factores, pero uno de ellos es la existencia de tuberías muy antiguas de concreto, instaladas hace 50 o 60 años, que con el paso del tiempo han ido colapsando, ocasionando el cierre del flujo y afectaciones en el terreno”, mencionó Arcos Espinosa.